El 6 de agosto de 1945, Yoshitaka Kawamoto, de 13 años de edad, se encontraba en la escuela con sus compañeros cuando la primera bomba atómica cayó en Hiroshima, ciudad del sureste de Japón. Uno de los pocos sobrevivientes de ese infierno —su escuela estaba a apenas 800 metros del hipocentro—, Kawamoto creció para convertirse en el director del Museo Conmemorativo por la Paz de la ciudad. Ahí, cada año cuenta su historia a incontables visitantes de todo el mundo, incluyendo al editor de Visión, David Hulme.